Reconocer la importancia de nuestro entorno

Con cierto retraso y gracias a un blog amigo, hoy encontré esta noticia de hace más de un año:

http://www.elpais.com/videos/cultura/virtuoso/violin/logra/llamar/atencion/metro/Washington/elpvidcul/20070410elpepucul_1/Ves/

Un experimento social que hace reflexionar sobre cómo nos influencia nuestro entorno y la importancia de cuidarlo en todas los eventos que organizamos.

¿Crisis, qué crisis?

Ahora que parece que todo a nuestro alrededor se agita, se estremece, ante la palabra crisis quizás sea momento de refrescar el viejo debate sobre la necesidad de diferenciar entre "ser y tener".

Parece como que cotidianamente nos preocupamos más de luchar por "tener" que por "ser".

¿Cuantas veces en nuestra vida pensamos "quiero tener....." o "porqué no puedo tener...."?

Y sin embargo, ¿cuantas veces nos decimos "quiero ser..." o "porqué no puedo ser..."?

Toda crisis es buena para replantearse los verdaderos valores que tenemos en nuestra vida.

Y todo momento es bueno para reavivar el valor que tiene una abrazo y recordar que somos AMOR

¿Quien nos pone límites?

El cuento del elefante encadenado

"Cuando era niño me encantaban los circos, y lo que más me gustaba de los circos eran los animales. También a mí como a otros, después me enteré, me llamaba la atención el elefante. Durante la función, la enorme bestia hacia despliegue de su tamaño, peso y fuerza descomunal… pero después de su actuación y hasta un rato antes de volver al escenario, el elefante quedaba sujeto solamente por una cadena que aprisionaba una de sus patas clavada a una pequeña estaca clavada en el suelo.

Sin embargo, la estaca era solo un minúsculo pedazo de madera apenas enterrado unos centímetros en la tierra. Y aunque la cadena era gruesa y poderosa me parecía obvio que ese animal capaz de arrancar un árbol de cuajo con su propia fuerza, podría, con facilidad, arrancar la estaca y huir. El misterio era evidente: ¿Qué lo mantiene entonces? ¿Por qué no huye? Cuando tenía 5 o 6 años yo todavía creía en la sabiduría de los mayores. Pregunté entonces a algún maestro, a algún padre, o a algún tío por el misterio del elefante. Alguno de ellos me explicó que el elefante no se escapaba porque estaba amaestrado. Hice entonces la pregunta obvia: Si está amaestrado, ¿por qué lo encadenan? No recuerdo haber recibido ninguna respuesta coherente. Con el tiempo me olvide del misterio del elefante y la estaca… y sólo lo recordaba cuando me encontraba con otros que también se habían hecho la misma pregunta.

Hace algunos años descubrí que por suerte para mí alguien había sido lo bastante sabio como para encontrar la respuesta: El elefante del circo no se escapa porque ha estado atado a una estaca parecida desde muy, muy pequeño. Cerré los ojos y me imaginé al pequeño recién nacido sujeto a la estaca. Estoy seguro de que en aquel momento el elefantito empujó, tiró, sudó, tratando de soltarse. Y a pesar de todo su esfuerzo, no pudo. La estaca era ciertamente muy fuerte para él. Juraría que se durmió agotado, y que al día siguiente volvió a probar, y también al otro y al que le seguía… Hasta que un día, un terrible día para su historia, el animal aceptó su impotencia y se resignó a su destino. Este elefante enorme y poderoso, que vemos en el circo, no se escapa porque cree -el pobre- que NO PUEDE. Él tiene memoria y recuerdo de su impotencia, de aquella impotencia que sintió poco después de nacer. Y lo peor es que jamás se ha vuelto a cuestionar seriamente ese registro. Jamás… jamás… intentó poner a prueba su fuerza otra vez…"

Este antíguo cuento, recopilado y contado por Jorge Bucay en sus libros, viene a recordar que la mayoría de los límites nos los ponemos nosotros mismos. Lo demás son excusas y falsas justificaciones.

La medida de las cosas

La medida de las cosas tangibles se nos suele dar por apreciaciones subjetivas, por comparación. Todo puede ser grande o pequeño según con lo que lo comparemos. Este mapa de Africa seguro que nos va a sorprender.

Actividades estivales del panorama nacional

Este verano tenemos un buen surtido de actividades: escuelas y campamentos, formaciones, encuentros de refresco, ... Quizás no sea necesario, pero me gustaría recordar que estas actividades las ofrece la comunidad bahá'í a toda la sociedad!

Para los niños (nacidos entre 1996 y 2001) tenemos la Escuela de Verano de Niños, que será en Lliria (Valencia) del 29 de junio al 4 de julio. El tema central de la escuela será 'Abdu'l-Bahá.

Para los prejóvenes de Alicante (nacidos entre 1993 y 1995) tenemos el campamento de la zona sur, que será en Constantina (Sevilla) del 20 al 27 de Julio. El tema: Soldados de la paz.

Para los jóvenes, adultos, ancianos... (a partir de 15 años) tenemos la Escuela de Estudio Intensivo Ruhí, que será del 16 al 24 de agosto, en Lliria (Valencia). Esta escuela también cuenta con programa para los niños y prejóvenes.

Para todas las edades, tenemos varias cosas:

• la Escuela Nacional de Verano, del 10 al 15 de Julio en Lliria; el tema monográfico girará sobre la figura de El Guardián y contaremos con la presencia de ponentes como Don Washington Araujo y Don Armando Garcia

• la Escuela de Gitanos, del 7 al 10 de Agosto en Lliria; abierta a todos los amigos y goza de mucha participación muy variada y diversa.

• la Escuela de Persas, también en Lliria; para ésta es recomendable llevarse un diccionario persa-español :P

¡¡Yo no me perdería ninguna!!

Para saber más sobre las escuelas y cómo inscribirse, contacta con Jose Maria Romero b4jrome@arrakis.es

Sobre el amor

Lo blando es más fuerte que lo duro,

el agua es más fuerte que la roca,

el amor es más fuerte que la violencia.

H. Hesse